lunes, 21 de mayo de 2012

MISA DE PENTECOSTES



Buenos días a todos. ¡Bienvenidos a este último día de la Pascua! Celebramos hoy,  la gran fiesta del Espíritu Santo. A los diez días de subir a los cielos, Jesús envió a los apóstoles al Espíritu Santo, que los impulsó a predicar el Evangelio por el mundo entero. En esta Eucaristía, vamos a dar gracias a Dios Padre, en Cristo Jesús, por medio del Espíritu Santo, por todos los dones que nos  ha concedido Lo haremos de la mano de la Virgen, que tan maravillosamente ayudó a que los apóstoles a que se prepararan para la venida del Espíritu Santo.
 Nos ponemos  de pie, y recibimos al sacerdote cantando.





 .Porque, con alguna frecuencia, no nos hemos dejado conducir por el Espíritu  Santo.
 Señor, ten piedad.
· Porque, al no invocar al Espíritu Santo, muchas veces nos ha faltado fortaleza en las dificultades.
 Cristo, ten piedad.
· Porque hemos sido cobardes y, en ciertos momentos, no hemos tenido la valentía necesaria para defender a Cristo y su doctrina. Señor, ten piedad. 




PRIMERA LECTURA


El Espíritu Santo produce y empuja hacia el amor; es lo que vamos a escuchar en la primera lectura. Por otro lado, en la segunda y en el Evangelio, comprobaremos cómo se nos habla de una energía excelente, el Espíritu Santo, y cómo, las primeras comunidades cristianas fueron obra de ese mismo Espíritu, “Espíritu de verdad que nos guiará hasta la verdad plena.




Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 2, 1-11 
Al llegar el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en el mismo lugar. De repente, un ruido del cielo, como de un viento recio, resonó en toda la casa donde se encontraban. Vieron aparecer unas lenguas, como llamaradas, que se repartían, posándose encima de cada uno. Se llenaron todos de Espíritu Santo y empezaron a hablar en lenguas extranjeras, cada uno en la lengua que el Espíritu le sugería. Se encontraban entonces en Jerusalén judíos devotos de todas las naciones de la tierra. Al oír el ruido, acudieron en masa y quedaron desconcertados, porque cada uno los oía hablar en su propio idioma. Enormemente sorprendidos, preguntaban: -No son galileos todos esos que están hablando? Entonces, cómo es que cada uno los olmos hablar en nuestra lengua nativa? Entre nosotros hay partos, medos y elamitas, otros vivimos en Mesopotamia, Judea, Capadocia, en el Ponto y en Asia, en Frigia o en Panfilia, en Egipto o en la zona de Libia que limita con Cirene; algunos somos forasteros de Roma, otros judíos o prosélitos; también hay cretenses y árabes; y cada uno los oímos hablar de las maravillas de Dios en nuestra propia lengua 
Palabra de Dios.



Salmo Responsorial:    VIII Semana de PASCUA ciclo B





Sal 103, lab y 24ac. 29bc-30. 31 y 34 (R.: cf. 30) 
R/. "Envía tu Espíritu, Señor, y repuebla la faz de la tierra" 
Bendice, alma mía, al Señor: 
Dios mío, qué grande eres! 
Cuántas 'Son tus obras, Señor; 
la tierra está llena de tus criaturas. 
R/. "Envía tu Espíritu, Señor, y repuebla la faz de la tierra" 
Les retiras el aliento, 
y expiran y vuelven a ser polvo; 
envías tu aliento, y los creas, 
y repueblas la faz de la tierra. 
R/. "Envía tu Espíritu, Señor, y repuebla la faz de la tierra" 
Gloria a Dios para siempre, 
goce el Señor con sus obras. 
Que le sea agradable mi poema,
y yo me alegraré con el Señor. 
R/. "Envía tu Espíritu, Señor, y repuebla la faz de la tierra"


Segunda Lectura: 



Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 12, 3b-7. 12-13 
Hermanos: Nadie puede decir: Jesús es Señor, si no es bajo la acción del Espíritu Santo. Hay diversidad de dones, pero un mismo Espíritu; hay diversidad de ministerios, pero un mismo Señor; y hay diversidad de funciones, pero un mismo Dios que obra todo en todos. En cada uno se manifiesta el Espíritu para el bien común. Porque, lo mismo que el cuerpo es uno y tiene muchos miembros, y todos los miembros del cuerpo, a pesar de ser muchos, son un solo cuerpo, así es también Cristo. Todos nosotros, judíos y griegos, esclavos y libres, hemos sido bautizados en un mismo Espíritu, para formar un solo cuerpo. Y todos hemos bebido de un solo Espíritu. 
Palabra de Dios.











Lectura del santo evangelio según san Juan 20, 19-23 
Al anochecer de aquel día, el día primero de la semana, estaban los discípulos en una casa, con las puertas cerradas por miedo a los judíos. Y en esto entró Jesús, se puso en medio y les dijo: "Paz a vosotros". Y, diciendo esto, les enseñó las manos y el costado. Y los discípulos se llenaron de alegría al ver al Señor. Jesús repitió: Paz a vosotros. Como el Padre me ha enviado, así también os envío yo. Y, dicho esto, exhaló su aliento sobre ellos y les dijo: Recibid el Espíritu Santo; a quienes les perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos. 
Palabra del Señor.



ORACIÓN UNIVERSAL


Por la Iglesia, extendida por todo el mundo; para que, impulsada por el Espíritu Santo, permanezca atenta a lo que sucede en el mundo, haga suyos los sufrimientos, alegrías y esperanzas de los hombres de nuestro tiempo, intuya los signos caritativos que debe realizar y así pueda iluminarlo todo con el Evangelio, roguemos al Señor.


Por todos los pueblos y razas en la diversidad de culturas y civilizaciones; para que el Espíritu Santo abra los corazones de todos al Evangelio, proclamado en sus propias lenguas, y los guié hasta la verdad plena, roguemos al Señor.


Por nuestro mundo de hoy, sujeto a cambios profundos y rápidos; para que el Espíritu Santo, que abarca la historia humana, promueva la esperanza de un futuro mejor y vislumbremos el gran día de Jesucristo, roguemos al Señor.
Por los jóvenes; para que, guiados por el Espíritu Santo, puedan responder con generosidad a la llamada del Señor en la vida religiosa y sacerdotal, roguemos al Señor.


Por este año dedicado a la Eucaristía para que crezca en nosotros la devoción a Jesús Sacramentado, roguemos al Señor.


Por nosotros, aquí reunidos; para que, iluminados y fortalecidos por el Espíritu Santo, demos testimonio de nuestra fe, roguemos al Señor.






CANTO DE OFERTORIO




RE Mim LA7 RE
SANTO

Santo, Santo, Santo es el Señor
CORDERO DE DIOS

OH CORDERO DE DIOS
TÚ QUE QUITAS EL PECADO DEL MUNDO
TÚ QUE QUITAS EL PECADO DEL MUNDO
TEN PIEDAD DE NOSOTROS, OH SEÑOR. (BIS)


OH CORDERO DE DIOS
TÚ QUE QUITAS EL PECADO DEL MUNDO
TÚ QUE QUITAS EL PECADO DEL MUNDO
DANOS LA PAZ.




CANTO DE COMUNIÓN


 ILUMINAME SEÑOR CON TU ESPÍRITU
 Ilumíname, Señor, con tu Espíritu(4)

/Y déjame sentir,
el fuego de tu amor
aquí en mi corazón, Señor./ BIS

Bautizame, Señor, con tu Espíritu, (4)

Conviérteme, Señor, con tu Espíritu(4).

 Fortaléceme, Señor, con tu Espíritu(4),

Consuélame, Señor, con tu Espíritu(4).

ESPIRITU DE DIOS


 Espíritu de Dios
llena mi vida,
llena mi alma,
llena mi ser (bis)

LLENAME, LLENAME
CON TU PRESENCIA LLENAME, LLENAME
CON TU PODER LLENAME LLENAME,
CON TU BONDAD. (BIS)

Si Dios no habita en mi
vivo sin rumbo,
vivo sin calma,
vivo sin fe. (bis)

ACCIÓN DE GRACIAS





(Jesús), (tu que prometiste enviar) (tu espiritu) re, Do, re
(a los que te ruegan), (oh Dios) Fa sol
(para dar)(al mundo)(tu amor) Do Fa re
(enciende)(nuestro cora)(zón) La# La re